Museo del Louvre: Antiguo Egipto

Pared de la tumba de Seti. Dos de los 5 nombres del rey: Sa-Re Seti Meren Ptah El hijo del sol, el hombre de Seth, amado de Ptah.

Presentación de la sección de Antigüedades egipcias

Esta sección presenta vestigios de aquellas civilizaciones que se sucedieron a orillas del Nilo desde finales de la Prehistoria (alrededor de 4000 años a.c.) hasta la época cristiana (a partir del siglo IV d.c.).

Creación de la sección

La creación de esta sección no fue consecuencia directa de la expedición de Bonaparte a Egipto entre 1798 y 1801. Las antigüedades recogidas por los sabios fueron confiscadas por los ingleses como botín de guerra, entre las que se encuentra la célebre “Piedra Roseta”, hoy en Londres. Un número de obras donadas entraron en el Louvre más tarde.

Por otra parte, la publicación del libro de recuerdos de Vivant Denon en 1802, “Viaje al alto y bajo Egipto” y los dos volúmenes de la “Descripción de Egipto” por los miembros científicos de la expedición, entre 1810 y 1830, reactiva el interés por el Egipto antiguo a lo largo del primer cuarto del siglo XIX.

Jean-François Champollion creció en este ambiente. Era un auténtico lingüista que dominaba las lenguas antiguas y semíticas, y fue el que resolvió el enigma de la escritura y de la lengua faraónica en 1822. Ávido de dar a conocer la civilización egipcia y de combatir los prejuicios de los sabios de su tiempo, trabaja en la instalación del museo de Turín. Y convence al rey de Francia, Carlos X, de comprar tres grandes colecciones en venta en Europa (Durand, Salt et Drovetti). El rey lo nombrará conservador de la nueva sección del Louvre inaugurada en diciembre de 1827.

Constitución de la colección.

Antes de Champollion, el Museo central de las Artes presenta estatuas egipcias de antiguas colecciones reales. Este fondo se enriquece bajo Luis XVIII con esculturas importantes: Nakhthorheb, los Sekhmet.

Entre 1824 y 1827, se crea una sección con la llegada de colecciones enteras (9000 obras). Más tarde, entre 1852 y 1868, las salas se enriquecen con conjuntos acumulados por coleccionistas europeos, como la copa de oro, el regalo del faraón o la momia del gato.

Finalmente,  1852 y 1853, un enviado a Egipto en misión para el Louvre, Mariette, descubre el Sérapéum de Saqqara y envía a París miles de obras entre las que se encuentran el famoso escriba sentado. Para los museos europeos comienza la era del reparto de los sitios Arqueológicos, consecuencia de las investigaciones Arqueológicas llevadas a cabo por científicos gracias a las concesiones del gobierno egipcio.

Algunas obras proceden de la generosidad de los amateurs, como el Atherton Curtis que lega 1500 piezas.

Organización de la sección

Una muestra del magnífico arte del antiguo Egipto. Esfinge en uno de los halls.

Las salas se repartieron en dos niveles, el Egipto faraónico se encuentra en el sótano y el entresuelo. Los objetos más pesados se dejaron en el sótano, donde hay una presentación temática centrada en los principales aspectos de la civilización, en las salas de la 1 a la 19, con las salas del templo y los sarcófagos.

En el primer piso la exposición se concibe con un enfoque cronológico (salas 20 a 30), que destaca las secuencias históricas y la evolución del arte.

Desde 1997, el Egipto romano y copto se instala en el entresuelo, en el ala Denon, alrededor del patio Visconti, en el seno de un programa consagrado a la Antigüedad tardía en el Mediterráneo oriental. La sala de arte funerario, rico en retratos de momias precede a una galería que aborda los demás aspectos de la cultura del Egipto romano.

Finalmente, la galería de are copto y la sala de Baouît (reconstitución de la iglesia del monasterio) hacen revivir el Egipto de la época bizantina.

Salas

Egipto: un país desértico atravesado por el río más grande del mundo

El río Nilo atraviesa el desierto del Sahara y desemboca en el mar formando un enorme delta. En julio inunda el valle fertilizando la tierra. Fue esta fertilidad propiciada por el Nilo la que favoreció la creación de las diferentes civilizaciones que se fueron sucediendo a orillas del Nilo desde el año 4000 a.c. al siglo IV d.c. Este departamento presenta vestigios de todas ellas.

Desde el final de la Prehistoria hasta el final del Imperio Medio (hacia 3800 – 1710 a.c.)

Existen pocos vestigios de los períodos antiguos. Bajo las dos primeras dinastías se desarrolla la escritura y el arte. Las pirámides del Imperio Antiguo, rodeadas de las mastabas de los cortesanos nos informan sobre el poder del rey. En el Imperio antiguo se multiplican los testimonios de la clase media.

Egipto romano (30 a.c. – 392 d.c.)

Bajo la dominación romana, nace un arte mixto de formas y tradiciones faraónicas y del estilo greco-romano. Pero también nos encontramos con un Egipto el que el arte funerario tiene una gran importancia. Reyes como Osiris se hacían embalsamar para acceder a la vida eterna. Ataúdes, retratos de momias y máscaras son el reflejo del arte funerario.

Objetos de la vida cotidiana

Existen vestigios bien conservados que permiten descubrir muchos aspectos del modo de vida de los egipcios en la antigüedad. En el Louvre se dedican las salas del sótano (salas 3-10) a la economía, la explotación del medio natural, la economía, la alimentación, las técnicas artesanales y el mobiliario doméstico.

Escriba sentado. Imperio Antiguo, IV dinastía, hacia 2620-2500 a.c.

Imperio Nuevo (hacia 1550 – hacia 1069 a.c.)

En el Imperio Nuevo el poder de los faraones se extiende del Eufrates al Nubia. El arte al servicio de los templos y de la clase dominante alcanza un gran refinamiento tanto en la forma como en la innovación técnica. Al final del período, los individuos expresan sus alabanzas y rezos a los dioses en estelas.

Egipto cristiano (siglo IV-XII d.c.)

El cristianismo predomina en Egipto a lo largo del siglo IV. Un testimonio de la originalidad del arte cristiano de Egipto, llamado copto, puede observarse en el decorado esculpido de la iglesia de Baouit. Se han encontrado un gran número de tapices muy refinados que engalanaban las túnicas.

Creencias religiosas y funerarias

La civilización faraónica ha dejado innumerables testimonios de creencias y de prácticas funerarias: sarcófagos, vestigios de tumbas y papiros. Existen muchos testimonios de la religiosidad de los egipcios, como fragmentos de templos donde se practicaba el culto o figuras y amuletos.

Últimas dinastías faraónicas y la época ptolemaica (hacia 1069 – 30 a.c.)

La inestabilidad policía y las invasiones acentúan el sentimiento de inseguridad. Si el rol político y religioso del faraón se mantiene, Egipto busca una protección individual en los dioses a través de los exvotos.

El arte se modificará con el contacto con persas, macedonios y romanos.

Reserva de Entradas