La muestra asiática de Museo del Quai de Branly intenta dar a conocer la gran diversidad del continente más grande del planeta. La colección cuenta con 58.000 objetos, una cantidad grande pero que sólo es un fragmento de la gran diversidad de poblaciones y culturas del mundo asiático, muchas del cuales han estado ocultas u olvidadas. La mayoría de los objetos provienen del siglo XIX y XX con lo que dan una imagen bastante homogénea de ese periodo de la historia en Asía, siendo complementarias de las obras con las que cuenta el Museo del Louvre y el Museo Guimet, aquellas pertenecientes a las grandes civilizaciones del pasado
La manera de exponer las obras, la elección museográfica, se ha dirigido hacia una serie de grandes temas que se presentan de manera profunda y no hacia una evocación generalista de la inmensidad de un continente donde hoy vive la mitad de la humanidad. La exposición permanente invita a descubrir y comprender un modo de vida, unas costumbres, creencias y un conocimiento tan amplio como diverso. 850 objetos, instrumentos de trabajo, herramientas, armas, obras religiosas y decorativas, trajes, vestimentas y elementos arquitectónicos componen la selección.
Un viaje desde el lejano Oriente
La exposición marca un itinerario que va del este al oeste del continente, organizado gracias a un eje central compuesto por cuatro grandes vitrinas con trajes típicos de numerosas poblaciones. De esta forma ya se muestra desde el principio la inmensa diversidad de un continente que en Europa y América tendemos a uniformizar bajo estereotipos vagos y frecuentemente peyorativos.
Este hilo conductor se despliega en conjuntos consagrados a temas capitales y específicos. El público puede descubrir la artesanía del papel en Japón; las tradiciones chamánicas siberianas; las culturas de las aldeas del Asia del Sudeste; las diversas formas del Budismo; la China Han y las minorías Miao o Dong; los mitos y ritos de la India; las poblaciones nómadas y sedentarias de Asía central; el lenguaje de del adorno, las pinturas corporales, los aderezos y el simbolismo de las armas en Oriente Medio y la civilización del desierto en Arabia
La idea de las presentaciones es ilustrar los contactos y los intercambios culturales, en lugar de reforzar la idea errónea de la permanencia de culturas incólumes ante el tiempo y el resto de los hombres. En otras presentaciones se revela la homogeneidad del continente, los puntos comunes entre las culturas asiáticas. Así, el teatro de sombras se encuentra en China, pero también en la India, Siria o Tailandia. Los tejidos ikatés se producen en el sureste asiático y en la India, Asia central, Siria y Yemen.
Diversos lenguajes, diversos alfabetos y una cultura oral de gran tradición e importancia.
En Asía se utilizan más de 2.000 lenguas. Uno de los módulos se ocupa de la escritura y la tradición oral. Se muestran diversos tipos de escritura, pictográfica, hindú, china, árabe. La extraordinaria riqueza de la oralidad aparece gracias a transcripciones sonoras de las poblaciones sin escritura, pero también se presenta la fuerza de la tradición oral en el mundo árabe actual.
El uso de los medios multimedia permite introducir al visitante en el ecosistema que se visita, en el mundo de los desiertos de Asia central o del norte siberiano, penetrar en un templo hindú, observar la fabricación de los tejidos y el cultivo del arroz, como si se estuviera allí mismo…
Compra de entradas.
Para comprar la entrada con antelación al museo del Quai de Branly.