La marcha no es una cualidad europea, tampoco francesa por lo tanto. Esto es muy importante tenerlo en cuenta a la hora de viajar a París, y a Francia en general. Se viaja a París para ver museos, para callejear, ver exposiciones, dar paseos románticos, subir a la Torre Eiffel, etc. Si su idea de las vacaciones es tomar cafés en las terrazas y salir de fiesta por las noches yendo de un pub al otro, París no es su ciudad. Precisamente esas cosas son las más caras y menos accesibles, por no hablar de los horarios.
Dos simples detalles para ilustrar lo que les decimos. La hora feliz, la happy hour de los bares de la zona del Panteón, Mouffetard y Marais, comienza a las 4 de la tarde. Segundo detalle, los días de partido de fútbol, cuando juegan los equipos franceses contra los grandes de Europa, pues bien a esa hora los bares ya han cerrado y todo el mundo está en su casa.
La calle no es un lugar de convivencia ni de socialización, la gente no queda para ir de tapas ni para tomar café tras café. Podemos quedar con alguien y tomar una cerveza, un café y charlar durante horas sin ser importunados por los camareros. Por ello el precio de este tipo de consumiciones es alto.
La zona de Bastille.
La zona de la Bastilla se asemeja a zonas de bares y pubs como Malasaña en Madrid o Gracia en Barcelona. No es una zona demasiado grande y mucha gente se queda simplemente en la plaza de la Bastille, en donde encontramos grandes almacenes, cines, la Opera Bastille y muchos restaurantes de comida rápida, kebaps y hamburgueserías de las grandes y conocidas marcas.
Introduciéndonos un poco entre las callejuelas descubriremos algunos pubs donde la gente se agolpa, sobre todo cuando el frío aprieta. Cuidado, si ustedes se sientan en una mesa aquí deberán consumir con bastante asiduidad, sino el camarero les “invitará” a hacerlo o en su defecto a abandonar el local. Son bares pequeños y, al contrario, que en España, los camareros siempre están ojo avizor.
El Marais.
El barrio del Marais es famoso por sus callejuelas, sus museos y sus comercios y restaurantes judíos. Es un barrio muy pintoresco, a escala humana y poblado por gentes muy diferentes. Se trata también del barrio gay de París. Muchos de los restaurantes y pubs arbolan la bandera arcoiris dando si cabe más colorido a un barrio muy interesante y con buen ambiente.
Como siempre los horarios son bastante estrictos y más allá de las 10 de la noche la animación decae, eso sí, podemos encontrar gente por la calle todo el año, todos los días de la semana, hasta las 10, claro.
Es un barrio con muchos rincones de interés, tiendas peculiares y bares con encanto.
Mouffetard.
Uno de los preferidos de los redactores. Un ambiente muy parecido al de Bastilla, pero mucho más parisino. Menos turistas, muchos Erasmus, no en vano se encuentra en lo alto de París, cerca del Panteón, de la Sorbona y de Notre Dame y Luxemburgo. Pequeños pubs con camareros mucho más amables que los de Bastilla y muchos restaurantes donde picar sin pagar mucho. La happy hour comienza a las 4 o 4 y media de la tarde. Por la noche decae, pero en algunos pubs hay música en directo.
Notre Dame y Saint-Michel
El mismo centro de París con sus inconvenientes y ventajas. Bien comunicado, en la plaza Saint Michel encontramos numerosas librerías de segunda mano con precios y material irresistible y también muchísimos restaurantes especializados en la caza del turista. Hay para todos los gustos y generalmente no muy caros. El ambiente es muy, muy turístico, peor eso puede agradar a ciertos viajeros. Alejándonos unas calles podemos llegar a Mouffetard, Saint Germain des Pres o Luxemburgo.
Saint-Germain-des-Pres
Era el barrio de los artistas, el de los cantantes de jazz. Coltrane, Charlie Parker, Miles Davis, Picasso, Sartre, Cortazar, etc… has paseado y tomado sus cócteles en estas calles y bares. Hoy es un barrio bonito, muy turístico y lleno de galerías de arte, tiendas de souvenirs, bares y restaurantes. Puede ser una alternativa para comer, ya que los precios no son caros. De noche decae rápidamente. Cafés como el conocidísimo Deux Magots se encuentran en este barrio.
Montparnasse
Famoso también por los artistas que vivieron en la zona hoy es un barrio de esparcimiento para los parisinos y los jóvenes que vienen el fin de semana desde las ciudades de la periferia. Muchos cines, restaurantes de las grande cadenas algún que otro centro comercial. Entre la paja, se puede encontrar alguna aguja de oro en forma de café con estilo o café concierto.
Montmartre
El barrio del Sacre Coeur, de Pigalle y del Moulin Rouge. Barrio turístico de noche, barrio de ambiente “oscuro” de noche. Millones de turistas y sex-shops se mezclan con aparente armonía. No es un barrio peligroso, – aunque haya que andar con cuidado, aquí y en todos los sitios -, es un barrio peculiar.
En un barrio chic no lo es al tiempo, apreciado por los bobos (bohemios burgueses, gente económicamente de derechas, políticamente de izquierdas) con recurso, es también un barrio de prostitución, oculta. En la zona alta hay buenos restaurantes y cafés donde podemos encontrarnos con Gerard Depardieu, pero lo que es marcha, juerga… no lo encontraremos.
En la zona se encuentran muchas de las salas de conciertos de París, salas conde toda la semana podremos ver y escuchar a los grupos de rock, jazz, pop, etc.. más famosos del mundo entero.
Los Campos Elíseos
La Avenida más famosa del mundo entero, muy concurrida el sábado por los jóvenes que llegan de fuera de París. Los jóvenes la recorren de arriba abajo cuando las tiendas y almacenes han cerrado y sólo quedan los cines y las grandes cadenas de comida rápida. Mejor recorrerla de día.
Picnic en París
En primavera y verano muchos jóvenes compran bebidas y comida y se tumban en los márgenes del Sena, junto al Jardin des Plantes, en la explanada des Invalides, en el Campo de Marte casi bajo la Torre Eiffel o en el Jardin de Luxemburgo para charlar, divertirse y bailar hasta tangos. El ambiente es muy bueno en estos picnic, bastante civilizado y respetuoso. Es una alternativa bien conocida por los estudiantes ERASMUS, cuando el tiempo acompaña claro está. Sobre todo los viernes y sábados.
Otras zonas y locales.
En París la dispersión es lo habitual, por lo que cuando la gente sale generalmente la salida se alarga hasta el último metro. Existen numerosos bares, restaurantes, salas de conciertos, clubes, etc… Existe todo lo que ustedes quieran probar o conocer, pero generalmente es necesario conocerlo de antemano, para poder llegar al barrio en donde se encuentra y poder llamar a la puerta oscura tras la que se oculta el último restaurante de diseño, o el último pub decorado por Lagerfeld.