París a pie
París es una de las capitales europeas más interesantes a nivel cultural. Pueden realizarse todo tipo de actividades. En primer lugar, París es una ciudad que debe descubrirse a pie. Una de las actividades más interesantes y más sencillas que pueden realizarse es caminar por la ciudad de las luces, de día o de noche, aunque nuestro objetivo no sea visitar sus increíbles monumentos. Tan sólo el hecho de pasear por los diferentes barrios con sus calles llenas de encanto y sus jardines y zonas verdes, que se multiplican por todo el espacio parisino, podemos sentir que no hemos perdido el tiempo. Es interesante comenzar nuestro paseo por el centro, justo donde se encuentra Nôtre Dame, visitar la Île de St Louis, cruzando un puente, encontrándonos a nuestro paso con músicos que tocan en cualquier esquina, gentes que pasean o que se sientan en un banco tranquilamente a leer un libro. Simplemente con admirar los edificios de la época haussmaniana que se encuentran en este barrio y por toda la ciudad, nos hacemos con una idea de un París majestuoso y lleno de historia. Muchos de ellos albergan en sus bajos tiendas de lo más original.
Cualquiera de las tiendecitas que se encuentran en este barrio y por todo París, son dignas de visitar, ya que son pequeñas y antiguas, cada una de ellas dedicada a un artículo en concreto. Así podemos encontrar desde tiendas en cualquier lugar, hasta tiendas especializadas en artículos de lo más inverosímil. Tiendas únicamente de sombreros de época, de disfraces antiguos, de vestidos confeccionados de forma original, de máscaras….Lo interesante de estas tiendas es el lugar en sí mismo, es como entrar en otro mundo, o tal vez, en otra época. También están las librerías de viejo, que nos atraen con la belleza de la encuadernación de sus libros, y nos sorprenden con libros que pensábamos que ya no se publicaban. Y París está lleno de librerías donde podemos encontrar verdaderas joyas, por no hablar de los bouquinistas, que son puestos de «bouquins» (libros) antiguos y de ocasión que se encuentran a ambas orillas del río Sena, en la margen derecha, desde el Puente Marie hasta el Louvre; y en la margen izquierda, desde el muelle de la Tournelle hasta el muelle Voltaire. Por lo tanto, una actividad interesante puede ser pasear a lo largo de los tres kilómetros que dura esta visita a esta histórica «librería al aire libre» que existe desde el siglo XVI.
Durante nuestro paseo por la Île de la Cité, admiraremos desde fuera algunos de los monumentos más bellos de París: Nôtre Dame, el Palacio de Justicia, la Saint-Chapelle, la Conciergerie…Al ir caminando siguiendo el río Sena, podemos hacer una parada en los puentes que nos vamos encontrando: el Pont Neuf, el Pont des Arts, el increíble Pont de Alexandre III cerca de los Inválidos…desde los cuales podemos mirar la ciudad desde otro punto de vista. De esta manera, siguiendo este itinerario, llegaremos a los monumentos más emblemáticos: el Museo del Louvre, el Museo de Orsay, la Torre Eiffel, Notre Dame... que podremos visitar.
El Barrio de Beaubourg, el Marais, la Place Vendôme
En la margen derecha del río Sena, nos encontramos con monumentos como el ayuntamiento o Mairie de Paris, que es un edificio de gran belleza delante del cual se realizan todo tipo de actividades durante todo el año: patinaje sobre hielo en invierno, exposiciones…No muy lejos, se encuentra la Plaza de Chatelet; atravesándola, llegamos al barrio de Beaubourg, donde podemos ir al Museo de arte Moderno o quedarnos por la zona y visitar la zona de Les Halles, donde se encuentra la Iglesia de St Eustaquio, delante de la cual hay una cabeza y una mano gigantes donde mucha gente se saca la típica foto.
El barrio del Marais, que es un barrio muy agradable con un gran número de tiendas de ropa de lo más original y con un gran estilo. Allí podemos pararnos para comprar algún regalo o para tomar algo en alguno de los modernos bares o cafés. Aunque también podríamos comer en alguno de los restaurantes judíos y probar algo diferente. Más tarde, los amantes del arte, pueden darse una vuelta por la Plaza des Vosges para visitar las galerías de arte, o simplemente para sentarse en algún banco a relajarse y disfrutar del ambiente agradable de esta histórica plaza.
No lejos del Louvre, está la Plaza Vendôme, donde podemos pasar por las diferentes joyerías y relojerías de lujo, eso sí, por pasar, porque no todo el mundo puede comprarse allí algo. La mejor opción si se quiere ir de compras y ver al mismo tiempo algo original, es ir a la zona de la Opera Garnier, que está a un paso de la Place Vendôme, y preguntar por las Galerías Lafayette, que se encuentra en los Grandes Boulevares (llenos de tiendas) algo así como El Corte Inglés, donde podremos encontrar de todo y admirar la preciosa cúpula.
Pigalle, Montmatre
El barrio de Pigalle es otro mundo que podemos visitar por la noche si nos apetece ir a algún espectáculo o revista. Vale la pena ir al Moulin Rouge o al Folies Pigalle, aunque hay otros lugares de espectáculos en otros puntos de París que también son interesantes. Una visita obligada es el Sacre Coeur y el barrio de Montmatre, donde podemos sentarnos a tomar unas deliciosas crepes mientras un pintor nos hace un retrato o una caricatura. Es un lugar bastante turístico, pero si nos salimos un poco de la zona donde hay más muchedumbre, podremos disfrutar de un bonito paseo por las calles y sentirnos en un París auténtico.
De las Tullerías a la Défense
Para aquellos que les gusta visitar jardines, no deben perderse el Jardín de las Tullerías, al lado del Museo del Louvre, donde podemos pasar un momento tranquilos, antes de pasar a una zona más concurrida, la de los famosos Campos Elíseos, donde se encuentran algunas de las tiendas más conocidas de París. Podemos darnos una vuelta para ver los bolsos de Vuitton, las joyas de Tiffany o los coches de diferentes concesionarios que allí se encuentran. O si no, acercarnos a la Avenue Montaigne y pasar por las boutiques de lujo más caras de mundo.
Si cogemos en metro en los Campos Elíseos cruzando el Sena, llegaremos al Barrio de la Defense, donde podremos subir al arco y disfrutar de maravillosas vistas de la ciudad, y de la city financiera donde nos encontramos.
La Torre Eiffel, Trocadero y los Inválidos
Una actividad ineludible es, por supuesto, subir a la Torre Eiffel, y es aconsejable hacerlo a pie, ya que es mucho más emocinante (se puede hacer hasta el segundo piso). Las vistas de la ciudad son increíbles, y la torre en sí nos ofrece espacios de exposición y también un restaurante donde comer o cenar sintiéndose en uno de los lugares más especiales del mundo. También puede hacer un pic-nic en los Campos de Marte, a los pies de la torre Eiffel o en el Trocadero y disfrutar de las vistas de la Torre Eiffel, tanto de día como de noche.
No muy lejos, puede visitar algunos de los museos más interesantes de París: el Museo de Artes no europeas, el Museo del Ejército, el Gran Palais y el Petit Palais.
El Barrio Latino, Barrio de Saint-Germain-des-Près y Montparnasse
En el Barrio Latino encontramos una de las universidades más conocidas de París: la Sorbona, el impresionante Panteón o el hermoso Jardín de Luxemburgo, donde la gente va a pasar un momento de tranquilidad. El paseo puede, de hecho, detenerse un buen momento en este jardín, para admirar la delicadeza de los jardineros que realizan verdaderas obras de arte en conjunción con la naturaleza. O descubrir el meridiano cero de París, línea imaginaria que divide el mundo en dos partes, y que pocos saben que se encuentra a los pies del Observatorio, en la continuación del Jardín del Luxemburgo, que ahí se llama Jardín de Marco Polo.
El Barrio Latino es un barrio lleno de animación, donde los estudiantes son los protagonistas. Nos encontramos con bibliotecas, bares, cines con carteleras que cualquier cinéfilo que se precie adoraría: desde estrenos de los más interesantes directores del mundo, hasta películas antiguas que muchos no soñaban con que las verían algún día en la pantalla grande. No muy lejos está el barrio del Mouffetard, un buen lugar para tomarse unas cervezas o comer, con la posibilidad de elegir restaurante según a qué parte del mundo nos apetezca visitar, ya que hay restaurantes japoneses, indúes, franceses, griegos…
En el barrio de Saint-Germain-des-près podremos admirar lujosas galerías de arte o librerías. Y del otro lado de la Avenida de Saint Germain, hacia el este, es posible ir al zoo o al Jardin des Plantes, que es un maravilloso jardín botánico que dejará al amante de las plantas boquiabierto por la cantidad y variedad de plantas que allí se pueden admirar.
Desde Luxemburgo hacia el suroeste, podemos subir a la Torre de Montparnasse, desde donde también hay unas vistas impresionantes de París. O visitar el Cementerio de Montparnasse, donde encontraremos grandes figuras de la historia: escritores, políticos, actores… Aunque también sería interesante acercarse a otro cementerio, el de Père Lachaise, que está más bien al norte, en el distrito 20.
Otros distritos
Los amantes del tenis podrían visitar París en el momento en que se celebra el Rolland Garros, en para así ver en directo los partidos de uno de los torneos de tenis más antiguos y admirar el juego de sus tenistas favoritos. El estadio de Rolland Garros se encuentra en el distrito 16, al oeste de París, al lado del Bosque de Boulogne.
Para los que prefieren la ciencia, la música o simplemente, la naturaleza, pueden ir a uno de los parques más grandes de París que se encuentra en el distrito 19, al noreste: el Parque de la Vilette, donde se encuentra la Ciudad de las Ciencias y la Cité de Musique. O si no, ir al parque de Vincennes, en el distrito 12, en la zona sudeste de la capital, donde podrá visitar el Castillo de Vincennes, una antigua prisión. O el Parc floral, donde tienen lugar espectáculos y conciertos gratuitos, y también salones, como el Salón de la Filatelia.