Nuevos destinos en avión y tren (TGV) para viajar a Francia

Ahora ya no tenemos excusa para viajar a Francia y conocer las maravillas que nos reservan nuestros vecinos, ya que viajar de España a Francia ya no es lo que era antes, y no estamos hablando únicamente de los últimos 30 años, sino también de estos últimos tiempos. Los españoles pueden llegar a algunas de las ciudades más importantes del hexágono de forma rápida y cómoda.

Cualquier medio de transporte es interesante, según el viaje que estemos planeando, pero los aviones son hasta ahora el medio más rápido, y la buena noticia es que están aumentando las rutas que llevan de España a Francia. Sin ir más lejos, la compañía Vueling, una de las más baratas del mercado, acaba de inaugurar una nueva ruta que operará entre Barcelona y Burdeos, una de las ciudades más interesantes de Francia, conocida internacionalmente por sus vinos y su gastronomía, pero también por su conjunto urbano, declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.

En tan sólo 1h10 llegará a la ciudad donde vivió Goya los últimos años de su vida. La ruta dispone de tres vuelos semanales: los miércoles, viernes y domingos, a las 11h30 (llegada a las 12h40) y a las 11h50 (llegada a las 13h00). Se trata de una nueva conexión con Francia, que se suma a las tres rutas que hay desde la ciudad condal  a Francia: París, Toulouse y Niza; y a las operadas desde once aeropuertos españoles (A Coruña, Alicante, Ciudad Real, Ibiza, Madrid, Málaga, Mallorca, Santiago, Sevilla, Tenerife y Valencia) con Francia.

Pero hay compañías aéreas que vuelan a diferentes ciudades del país vecino, desde hace tiempo como Iberia o Spanair, que ya hace tiempo que tienen líneas en funcionamiento, sobre todo Iberia que opera con las principales ciudades de Francia: París (Disney Paris y el Palacio de Versalles), Lyon, Burdeos, Montpellier, Marsella, Niza…y un largo etcétera.

Por otra parte, los trenes de alta velocidad se van instalando poco a poco en nuestro territorio, lo que supone un auténtico avance con respecto a nuestro pasado, pues permitirá que nos desplacemos rápidamente y comencemos a usar más este medio de transporte colectivo y práctico, dejando a un lado los coches. Y lo mejor es que podremos llegar a Francia de forma ultrarápida, ya que en el país vecino hace ya mucho tiempo que están en funcionamiento muchas de las líneas de TGV (train grande vitesse), el tren de alta velocidad francés, y la gente usa habitualmente.

Existe una línea que nos lleva de Irún a París en unas 7 horas, aunque, de momento, la línea no está totalmente cubierta por el TGV (se puede visitar el Futurscope); pero, si se encuentra en Nîmes, Montpellier o Aviñón, puede llegar a París en ¡sólo 3 horas!. Y, hace poco tiempo, se ha abierto la línea TGV desde Figueres Vilafant hasta Perpiñán, Narbona, Montpellier, Nimes y París (a Montpellier tarda sólo 2h09), y salen todos los días trenes desde Figueres a las 11h06 y a las 15h02. Para llegar a Figueres desde Barcelona Sants, hay un Talgo que sale a las 09h00 (llegada a las 10h42) y a las 13h00 (llegada a las 14h40), que pasa también por Girona. Gracias a esta línea, podemos conocer la magnífica ciudad medieval de Carcasona o la Reserva africana de Sigean), cerca de Narbona; y uno de los acueductos romanos mejor conservados del mundo: el Pont du Gard, cerca de Nimes.

De todos modos, si disponemos de tiempo para viajar, siempre está la opción de las carreteras, que nos permite pararnos siempre y cuando queramos, dándonos libertad para conocer cualquier lugar del camino; por ejemplo, en ciudades del País Vasco francés, como Biarritz, Bayona o en lugares espectaculares al lado del mar, como la Duna de Arcachón. Así, en Francia, las autopistas nos llevan rápidamente y sin gastar demasiado a las ciudades del sur: por ejemplo, Montpellier está a unas 4 horas de Barcelona; así como a las del centro y norte: Burdeos está a 2h20 y París está ya un poco más lejos (7h30), pero si disponemos de tiempo, podemos aprovechar para parar en otras ciudades francesas interesantes (Poitiers, Orleáns…).

Ahora ya no podemos decir que nuestros vecinos están lejos de nosotros, ya que viajar a Francia es más fácil, más barato y más rápido que nunca. Y las posibilidades se multiplican. Comencemos a soñar desde ahora con conocer la Torre Eiffel de París, EuroDisney, la Costa Azul, las playas del desembarco de Normandía o Bretaña, donde está el magnífico Mont San Michel…ya que están al alcance de nuestra mano.